Sonríe que estamos en crisis

Cada vez es más difícil dar la espalda al carrusel de noticias sobre la situación económica mundial, y en concreto, sobre la española. Cuando no es una cosa, es la otra pero siempre hay una crisis. Es una escalera donde se van añadiendo escalones con los sectores en crisis de la economía: en primer lugar la crisis inmobiliaria , la crisis del sector de la construcción y la crisis financiera, ahora se han ido sumando el sector de transportes, el sector pesquero, crisis en pequeños comercios, crisis en el sector textil, crisis en el sector agrario. Cada día se incorporan a la larga lista nuevos sectores: el precio del petróleo, la baja confianza del consumidor, subida de la bolsa de la compra, endeudamiento de las familias, el aumento del paro, la importante crisis ecológica, etc. La lista parece no tener fin y el ritmo de incorporación aumenta el tamaño de la imaginaria escalera de crisis (más bien habría que decir escalada).
Es hipotética la crisis actual?. Los medios de comunicación opuestos al Gobierno pretenden dar una imagen catastrofista, acentuando los elementos negativos, dan por hecho que se cumplirán las peores expectativas. Otros, por el contrario, los próximos al partido en el poder, resaltan los factores positivos y ocultan los peligros e incertidumbres. Según los expertos la única salida posible a la crisis es una acción combinada de medidas anticrisis tomadas por los poderes públicos y de medidas anticrisis de todos y cada uno de los sectores económicos que se han visto o se verán implicados.
¿Todo esto es lo que se merece una sociedad capitalista que no se mueve por cooperación sino por el propio interés? ¿La sobreproducción y el sobreconsumo en un mundo globalizado son sostenibles?. En fin, el mundo se va a la crisis (como siempre) pero ahora da la impresión que está ocurriendo todo demasiado rápido ¿verdad?
Hay que tomarse las cosas con un poco de humor que siempre ha sido la mejor receta para cualquier mal. Estos problemas no deben quitarnos el sueño ni preocuparnos en exceso, puesto qué no está en nuestras manos la solución a tantos conflictos.
Para relajarnos y quitarnos el agobio de leer tanto la palabra CRISIS… lo mejor será que nuestra mente se tome un respiro con unas preciosas fotos.