Una pareja. Un día cualquiera tras hacer el amor.
-Nunca me has contado tus fantasías…
-¿Qué?
-Tus fantasías sexuales…
-¿Y por qué iba a tener fantasías?
-Venga ya, todo el mundo tiene.
A través de este juego en 4 asaltos, sin noñerías verbales y sin tapujos, la pareja de "Nuestro propio cielo" pone sobre la cama las cartas de sus inseguridades, miedos y los resquicios por donde se escapa la aparente relación estable a los ojos de los demás.
Las fantasías sexuales son una mera excusa para hablar de secretos difíciles de confesar y para quitarse la mascara y la coraza de una pareja convencional que se tambalea y esta a punto de desmoronarse.
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