martes, 30 de junio de 2009

La isla de las muñecas


Julián Santana Barrera, mas conocido como el "pajarito" por su aspecto frágil y quebradizo, nació en el Barrio de la Asunción de "Xochimilco", una de las 16 delegaciones del distrito federal de México.

Julián vivía en un chamizo hecho de caña en una isla alejado del bullicio de la ciudad.

Xochimilco posee más de 190 kms de canales y sus aguas albergan toda clase de animales salvajes y exóticos.

Por uno de estos canales se desplazada Julián diariamente para vender en el mercado de Xochimilco con una carretilla las frutas y hortalizas que el cultivaba en su hacienda.

Un fatídico día, una niña se ahogó en uno de esos canales cerca de su terreno y desde entonces Don Julián comenzó a escuchar voces, pasos y lamentos de una mujer.

Los cultivos de Don Julián empezaron a no fructificar y a perderse estación tras estación.

Don Julián convencido que todo era fruto del espíritu de la niña, quiso protegerse de el y colgó una muñeca que encontró flotando en la ciénaga encima de su cabaña.

Pero no contento con esto y creyendo que una muñeca no era suficiente, fue recogiendo cuantas muñecas se encontraba al paso, rebuscando en las basuras o rescatándolas de los canales.

Así fue como Don Julián invadió toda la isla con muñecas. Muchas de ellas eran entregadas por amigos o familiares que aunque algunos tachaban a Don Julián de loco colaboraban con el, por si las moscas.

Con el paso de los años la isla se fue llenando de muñecas que colgaban de los árboles y anidaban en los rincones más inverosímiles de la isla convirtiéndose en un santuario de muñecas. Tal ha sido el impacto de la Labor de Don Julián que en la actualidad es uno de los lugares mas visitados de todo el DF de México y turistas y medios de comunicación no pasan por Xochimilco sin visitar la "Isla de las Muñecas".

El "Chope", un sobrino de Don Julián, es quien atiende la hacienda de su tío (que dios lo tenga en su gloria). A el Chope un buen día su mujer le dio a elegir entre ella o la isla, el Chope sin dudarlo dejó a su mujer. El propio Chope relata a los que diariamente visitan la isla, el día en que murió su tío.

Don Julián se hallaba pescando detrás de la casa, cuando le comentó a su sobrino que había pescado un pez que previamente se le había escapado dos veces; - ¡ ya lo tengo el que se me había escapado ! - le dijo Don Julián a su sobrino enseñándole un magnifico ejemplar de 4 o 5 kgs.

Don Julián entonces le comentó al Chope; que la sirena le había estado llamando porque se lo quería llevar y que ahora mismo iba a cantarle el para que no se lo llevará. -Ten cuidado tío- le respondió el Chope, yo voy a ordeñar a las vacas, y ahorita regreso.
Cuando el sobrino regresó con la leche, buscó a su tío. No lo encontró. Siguió buscando y lo vio flotando sobre las aguas. Había muerto ahogado. Había muerto ahogado en el mismo lugar donde muchos años antes se ahogó la niña.

Don Julián murió en el 2001 rodeado de muñecas ahorcadas, descabezadas, mutiladas. Eran su protección. Ahora su casa se visita como tour turístico, como ecoturismo. El bueno de Don Julián no creó una curiosidad para incrédulos turistas, creó una obra de protección para sus miedos, una obra llena de fe y terrorífica hermosura...Aunque nadie lo llame artista.





1 comentarios:

Anónimo dijo...

me encanto la historia no la conocia, y me ha causado una grata sensacion. Bonita historia les felicito