martes, 2 de junio de 2009

Un Bodhisattva en el metro


No todo lo contagioso es malo.

Hay contagios que nos pueden hacer cambiar el ánimo de un mal día o convertir un triste contratiempo en ataque de irrefrenables carcajadas de risa.

Un Bodhisattva es una persona embarcada en el camino de Buda, a través de la compasión y la sabiduría.

Su nombre es un compuesto de bodhi (supremo conocimiento, iluminación) y sattva (ser). Así pues hace referencia a un ser en una constante búsqueda de la suprema iluminación.

El Bodhisattva se convertirá en un ideal de vida al cual todo seguidor budista aspirará.

A parte de pasar un rato agradable, ese video da bastante que pensar. Nos demuestra que por muy oscuro que lo veamos todo o muy ofuscado que estemos, todo puede cambiar con una simple sonrisa y además nos deja entrever que todos estamos entrelazados, unidos en un todo, solamente una pequeña chispa conductora, y será suficiente para demostrar que nos unen muchas mas cosas de las que nos separan.

Lo único importante del sufrimiento es, que no es necesario.



1 comentarios:

Anónimo dijo...

Genial el corto e interesante. La interrelacion entre causa efecto.
me recordo al efecto mariposa: El aleteo de una insignificante mariposa en Hong kong puede desencadenar un tornado en Nueva York.
Ojala hubieran millones de Bodhisattva repartidos por el mundo.