Veréis…a veces, uno piensa. A veces incluso las ideas por descabelladas que parezcan pueden tener su “aquel” y lo que a primera vista puede parecer una locura, con el tiempo puede llegar a generalizarse y la persona que patenta esa idea se convierte en un inventor, y si su invento es bien recibido por el mundo, esa persona llega a aparecer en las grandes enciclopedias, wikipedias y libros de texto de los estudiantes y como consecuencia de tan rotundo éxito, esa persona es aplastada por montañas u océanos de ingentes cantidades de dinero. Conclusión: se monta en el dólar.
No pondremos ningún ejemplo de inventos que en su día fueron tachados de entupidos o inútiles, (seguro que a todos se nos vienen a la cabeza unos cuantos) pero con el paso del tiempo han llegado a ser imprescindibles en nuestras vidas.
En los tiempos que corren, en nuestra sociedad, hace años que dejamos de darle una importancia capital al hecho que una mujer llegara virgen al altar, es mas, hoy en día en nuestro país (salvo la etnia gitana, y en algunos casos ni ellos) si una chica quinceañera dice que es virgen, posiblemente sus compañeras de clase la miren como a un bichito raro. Pero hay sociedades, que tampoco pondremos ejemplos, en las cuales sí es muy importante e incluso requisito innegociable que sus mujeres lleguen puras, castas y vírgenes al matrimonio.
Una empresa japonesa especialista en la venta de artilugios para adultos, ha caído en ese detalle y se ha sacado de la manga un kit reparador del himen de la mujer.
Artificial Virginity Hymen (Himen Artificial de Virginidad). Una vez alojado el Artificial Virginity Hymen en tu vagina, experimenta una especie de “reset” que te la deja como cuando jugabas con tu amiguita a los cromos haciéndolos saltar con la palma ahuecada de tu mano. Osease aquí no ha pasado nada de nada.
Claro está, tú has de poner un poco de tu parte. No has de olvidarte dar unos grititos de dolor en el momento de la penetración para que la puesta en escena sea perfecta, el resto lo hará el Artificial Virginity Hymen. Una vez haya terminado la penetración, ósea, cuando te la hayan terminado de “jincar” el producto desprenderá un liquido rojo similar a la sangre para que tu amante no dude de tu palabra. Y todo esto solo por el módico precio de 14.90 $.
Y os preguntareis el ¿porque tanto rollo si a los tíos de hoy, ya no le importan esas chorradas, no? Pues no, no, aun hay personas en el mundo que valoran ese requisito, personas que anhelan ser los primeros en aventurarse en la entrepierna de una chica, personas las cuales estarían dispuestas a pagar sumas importantes, sumas absolutamente obscenas de dinero por ser los primeros en poseer a una chica virgen.
De ahí que comenzara este post, con lo de los inventos o ideas descabelladas. Este puede parecer serlo a simple vista, pero no, este invento te puede llevar a la gloria en lo que dura, lo que dura, “dura”.
Y eso lo sabía esta chica Natalie Dylan, que ha puesto su virginidad a subasta y han pagado por ella la nada despreciable cantidad de: casi 3 millones de euros. ¿No esta mal, no?… por un pedacito de tejido membranoso.
Akí la noticia
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